Luego del escándalo protagonizado por el concejal de Mariano Roque Alonso, Walberto Zárate, cuando violó las medidas sanitarias en la sede de la Junta Municipal, ciudadanos se agolparon frente a la sede, pese a la cuarentena, para protestar.
Los roquealonseños llegaron con carteles y batucadas para repudiar las actitudes de Zárate, quien habría agredido verbalmente a funcionarios de blanco encargados de los controles sanitarios e incluso les roció un líquido. Por eso, para hoy se había convocado una sesión extraordinaria como único punto, pero finalmente ni siquiera tocaron el tema.
El concejal Cristhian Jorgge, molesto con la decisión de sus demás colegas, dijo: “‘todo quedará en manos del Ministerio Publico’ dijeron los colorados y se retiraron del recinto. “Estamos cansados de este personaje, que fue echado por corrupto en su momento”.
Luego de levantarse la sesión , los concejales fueron escrachados a huevazos por los manifestantes.
Así entró el concejal Zárate a la sede municipal: