Cynthia Orué, la primera paraguaya en operar un avión de combate Super Tucano A-29.
Orué, de 32 años, y otros tres pilotos de caza de la Fuerza Aérea Paraguaya (FAP) fueron seleccionados para traer el 30 de junio pasado, desde Brasil, cuatro de las seis aeronaves de combate ligero que el Gobierno de Paraguay compró por 105 millones de dólares a la empresa brasileña Embraer.
Cynthia es la única paraguaya formada durante 2023 en el Curso de Especialización de la Aviación de Caza en la Base Aérea de Natal (este), en Brasil, lo que la habilitó para pilotar un Super Tucano A-29, una aeronave que cuenta, según dijo, con plataforma de armas, para lanzamiento de bombas, entre otras herramientas.
“Fue una preparación diría compleja”, señaló la aviadora, quien confesó que el día del recorrido con el A-29 desde Brasil hasta Paraguay su “corazón latía diferente”.
Con 700 horas de vuelo, 450 en aeronaves de instrucción y 250 en aviones de combate, Orué afirmó que convertirse en piloto militar “fue algo muy desafiante”.
“Tenemos pocas pilotos hasta hoy en día”, expresó esta joven, quien relató que su país ha tenido 16 pilotas, entre instructoras, conductoras de helicópteros, aviones de transporte y combate, desde 2006, cuando se graduó la primera promoción de la Academia Militar.
Ella, por ejemplo, se graduó en 2023 como la segunda piloto de combate de Paraguay, 11 años después de que la mayor Yennifer Pedrozo se convirtiera en 2012 en la pionera en operar un avión AT-27 Tucano.
12 mujeres
Cuando Orué entró, en 2011, a la Academia Militar fue una de las 12 mujeres de un grupo de 110 personas, y de ahí pasó a la FAP para entre 2015 y 2020 formarse en el Grupo Aéreo de Instrucción en el departamento de Concepción (norte).
Allí se graduó junto a otra mujer y ocho hombres y ejerció como instructora de la Escuela de Pilotaje.
Ahora es la única piloto en el Grupo Aerotáctico de la Primera Brigada Aérea, ubicado en la ciudad de Luque (centro), donde se forma para convertirse en ‘líder de caza’ o piloto militar cuya tarea es liderar en el aire la formación de aviones de combate.
Tras el camino recorrido, Orué reconoce que “históricamente las mujeres eran dejadas de lado”, pero vislumbra un futuro prometedor.
“Soñar pequeño y soñar en grande es gratis, entonces, mejor soñar en grande”, aconsejó a quienes quieran seguir su camino.
EFE