Augusto Sebastián Estrada tenía apenas seis meses cuando llegó a Paraguay, un día cualquiera del mes de enero, en el año 1982. Su madre, María Ruiz Díaz, cuando tenía 15 años había abandonado su tierra en busca de un futuro en Argentina.
Allá conoció a Ricardo Manuel Estrada, un argentino de 28 años que la conquistó. Un año más tarde nació Augusto. Sin embargo, ciertas circunstancias no favorecieron a continuar su estadía en el vecino país, por lo que regresó a Paraguay.
Al poco tiempo, María conoció a Juan Víctor Delpadre e inició una nueva relación. Al saber que ella tenía un hijo, él decidió darle su apellido.
“Rompió todos mis papeles de allá y me reconoció de nuevo. Tuvieron cinco hijos. Cuando mamá falleció, nos abandonó y repartió a todos sus hijos. Crecimos todos separados”, contó Augusto Sebastián, para quien tener dos identidades se ha convertido en un lío.
“Me dijeron que no puedo sacar nada a mi nombre, porque voy a dejar de existir acá. Lo peor es que mis hijos tienen ese apellido”, lamentó.
Contó que hace unos años encontró a su padre biológico y recuperó sus documentos argentinos. Posteriormente, se casó con su apellido real. “El problema es que mis hijos nacieron en IPS y ahí están registrados así, Delpadre”, continuó.
Augusto contó que, de encontrar a Juan Víctor, su padrastro, sería un poco más fácil todo, pues necesita sus documentos.
“Me dijeron que si le encuentro a él (Delpadre) va a ser más fácil, porque él fue el que rompió mis papeles. Tiene que renunciar y además aceptar que hizo mal. Me perjudicó mucho”, indicó el ciudadano con dos apellidos.
10 palos le va a costar. Augusto contó que consultó a varios abogados, pero el trámite es bastante largo. Si no lo hace, sus hijos tendrán el mismo lío cuando crezcan, dijo.
Legal, pero ilegal al mismo tiempo
Marta Olmedo, del Registro Civil, señaló que, legalmente, según los papeles, Augusto cuenta con dos identidades. Pero para nuestra legislación eso es ilegal. “Tiene que hacer la opción de nacionalidad y elegir cuál va a ser su identidad”, explicó. Aseguró que necesariamente tendrá que ser argentino, pues nació allá y los documentos avalan esa identidad. “Puede llegar a tener muchos problemas porque es un delito tener doble identidad”, agregó Olmedo.