19 oct. 2025

“Mi hija me salió con que se va a casar y recién tiene 22 años”

Marta cree que su retoña debe terminar primero su facultad para tomar la decisión.

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Ilustración

Soy Marta, tengo 50 años, soy madre de una chica de 22 años, y estoy muy angustiada. Mi hija está preparándose para casarse ya con su novio que tiene la misma edad que ella.

Llevan dos años juntos, y sí, reconozco que él es un buen chico: trabaja, la respeta, no le falta el respeto a nadie, es un buen partido. Pero yo siento que todo esto está yendo demasiado rápido.

Ella todavía ni terminó la facultad. Le falta más de un año para recibirse, y eso es lo que más me preocupa. Tiene una carrera hermosa, va a ser enfermera, pero desde que empezó a hablar de casamiento, todo su entusiasmo por estudiar cambió. Veo que todo su esmero está ahora en los preparativos de su boda.

Hace unos días, durante la cena dije que no me parecía que se case tan joven. Su papá, que es más callado, me pidió que no discutiera, pero yo no pude quedarme en silencio.

Le recordé que los primeros años de casada son difíciles, que todavía no sabe lo que es mantener una casa, que con 22 años una persona recién está empezando a entender lo que quiere.

Ella se levantó de la mesa súper enojada y no me habló por varios días. Yo quería acercarme, pero cada vez que quiero hablar del tema es cortante o directamente se esconde de mí en su pieza.

Mi marido me dice que hay que dejarle, que si se equivoca ahí va a aprender, que son cosas que debe pasar por su propia costilla, pero yo no me resigno.

El novio sique viene todos los días a casa, de lu a lu, a veces ya me empalaga hasta a mí. Pero eso sí, es educado, trabajador y todo, pero el tema es que es también un muchachito que ni sabe lo que quiere.

Cuando hablan del casamiento, parecen dos adolescentes planeando un viaje, no una vida juntos. Dicen que van a alquilar algo chico, que los dos trabajan y que se las van a arreglar, pero no saben hina lo que es empezar de cero.

A veces me desvelo pensando en lo que va a pasar si ella deja los estudios. Si después se arrepiente, si se da cuenta de que todo fue por impulso. Me da una crisis nerviosa, me enfermo todo por culpa de esto ¿Cómo puedo hacer para que me escuche sin que sienta que quiero controlar su vida?

La respuesta:

Buen día, mi estimada Marta, hay una expresión muy popular que dice “al que se quiere casar o comprar un auto, dejale nomás que lo haga” y casi nunca falla, porque la persona no acepta razones, más aún si son de otras personas. Creo que deberías esperar unos días, cuando vuelva la calma y vuelvas hablar con ella. Elegir un día y momento tranquilo para todos, donde esté presente el novio. Puedas tener una conversación serena con ambos, en donde primeramente le expongas que todo lo bueno que son los dos, comprometidos, estudiosos, responsables, buena gente entre otras cosas. Que entendés el entusiasmo con la boda y que sabés todo lo que conlleva arrancar una vida en pareja, casa, hijos, deudas etc. Pedirles, que a pesar de todo lo que sobrelleva un matrimonio, se comprometan en seguir sus estudios y realizarse como profesional ambos. Con esto estarás aliviando la angustia que te genera esta situación, haber hecho el esfuerzo de toda madre y a la vez aceptar las decisiones de los demás.

Psicólogo Clínico, especialista en jóvenes y adultos. (0981) 571 635