¿La palabra “mbóre” tiene origen inglés? La explicación de que la muy popular expresión paraguaya esté relacionado con el aburrimiento de los ferrocarrileros ingleses que llegaron al país hace más de 150 años generó toda clase de reacciones. Por ejemplo, el profesor David Galeano Olivera, del Ateneo de Lengua y Cultura Guaraní dio pistas de otro posible origen.
El reconocido docente e investigador del Guaraní comenzó admitiendo que la explicación publicada por el ingeniero Julio César Ingolotti de que proviene del inglés “I’m bored” (estoy aburrido) podría estar en lo correcto.
“Lo de mbore puede que tenga que ver con lo que dice el texto”, respondió al diario EXTRA. Luego, prosiguió: “Pero así como se dice ‘nde rekóre’, un abuelo me decía que la palabra era ‘ne rembóre’ y que con el tiempo quedó -según el- en mbore”.
Ingolotti comenta que entre 1853 y 1864 habían venido unos 200 técnicos europeos, casi todos ingleses, quienes trabajaban en el ferrocarril. Cuando se aburrían decían “I’mobred” y los trabajadores paraguayos asociaban con el malhumor. Así, empezaron a usar la expresión para describir el estado de ánimo de sus jefes. Luego, se simplificó en “mbore” y los obreros solían preguntar si el patrón estaba “mbore” antes de pedir una entrevista con el mismo.
Pero la polémica no termina. El artista Roberto Goiriz se hizo eco en Facebook de un artículo atribuido al arquitecto Jorge Robbiani, donde se hace una serie de comentarios sobre la controvertida palabra, incluyendo un posible origen brasileño: Supuestamente, después de la guerra del 70, los rapáis decían “vai embora” (vete de aquí), lo que según esos “expertos” (así le encomilla el artículo) pudo haber sido el inicio de la expresion local.
Otra posible explicación del artículo es que sería una derivación de la expresión “remboro” (hacés amargo). Es decir, el ejecutante de lo amargo sería el “mbore”, según esta hipótesis.
Luego descarta de plano la propuesta de Ingolotti, en el sentido de que “mbóre” sea una derivación del inglés “I am bored” (estoy aburrido). Solo vinieron 247 ingleses en aquel momento, de los cuales menos de la mitad eran técnicos. El resto eran familiares. Y todos tenían sus propios pasatiempos, no se mezclaban con la población local.
“Y por supuesto … habrán habido entre ellos, los abstemios o solitarios y la habrán pasado más que aburridos en aquella Asunción aldeana y carente de casi todo. Pero es difícil pensar que aún así, estuvieran recorriendo las polvorientas calles de la ciudad perifoneando “I AM BORED” … “I AM BORED”, para que los paraguayos terminaran aprendiendo a decir sólo “MBÓRE”.