El partido de anoche entre Trinidense y Recoleta tuvo un invitado de honor al minuto 78, en el estadio Martín Torres, cuando iba 2-2.
Un perrito hincha del barrio Trinidense vulneró toda la seguridad y se instaló en medio del estadio. Firuláis seguramente quería meter gol a favor del Triki.
El único que se animó a sacarle de la cancha fue el línea Félix Arzamendia, quien soltó su banderín y le alzó al juguetón con una sonrisota. Firuláis se dejó llevar sin atacar al árbitro.
Posterior al episodio, siguió el partido y los visitantes de Recoleta vencieron con un gol de penal de Alejandro Silva sobre el final del encuentro.
🐶⚽️¡ÉL TAMBIÉN QUERÍA JUGAR!
— Tigo Sports (@TigoSportsPY) September 15, 2025
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