La abogada Myra de Oliveira Athayde (27) no pudo engañar al Sistema de Tráfico Internacional, donde aparecían sus viajes a nuestro país para visitar al “doleiro” que durante 14 meses era el más buscado del Brasil, hasta que cayó el miércoles último.
Una de las rutas reiterativas fue la conexión entre el aeropuerto internacional de Guarulhos (Sao Paulo) y Asunción. Por ejemplo, en los registros saltaron dos viajes en noviembre último y dos más en enero de este año. Sobre su extraño novio, la mujer solo decía a sus amistades que era “un hombre de mediana edad, discreto”, según la revista Veja.
Pero además, la Policía Federal brasileña encontró un viaje de agosto del año pasado desde el aeropuerto Santos Dumont (Rio de Janeiro) hasta Dourados (Brasil, pero cerca de la frontera con Paraguay). La revista asevera que la pareja aprovechaba para sus encuentros el escaso control en la zona fronteriza.
Messer en Salto del Guairá
Por otra parte, es bastante difundido el dato de que Messer estuvo todo el tiempo en la zona e incluso el 12 de noviembre del 2018, fecha coincidente con el vuelo de Myra, el hoy encarcelado apareció en Salto del Guairá firmando una carta poder para sus abogados ante la escribanía de Miguel Alberto Bareiro Olmedo.
En Brasil creen que Messer se mudó al Paraguay un año después de que Cartes asumió como presidente. De hecho, el cambista llegó a formar parte de hasta de comitivas presidenciales, viajando dos veces a Israel con miembros del Gobierno paraguayo.
El verdadero doctor Batalha
Por otra parte, el diario O Globo encontró al verdadero doctor Marcelo de Freitas Batalha, cuyos documentos utilizó Messer para hacerse pasar por médico, luego de transformarse la cara con cirugía, barba y cambio de color de cabello.
Se cree que el doctor Batalha, de 60 años y jubilado, habría perdido sus documentos, lo que pudo haber facilitado que el doleiro usara los papeles para asumir su identidad. Sin embargo, el médico dijo que nunca había extraviado su registros.
“Mi esposa hasta me bromeó diciendo si quien iba a quedarse con los dólares”, comentó Marcelo de Freitas. Si bien el número y el nombre del documento coinciden con los del doctor, el mismo aclaró que ni la firma de Messer y menos la foto le parecían.