Don Benicio Ramón Fernández (47) desapareció en la madrugada del jueves pasado durante las intensas lluvias.
Ayer, lunes, sus familiares encontraron el cuerpo sin vida del hombre, quien aparentemente fue arrastrado por el raudal.
Sin embargo, los parientes ponen en duda que se haya tirado o que el raudal lo haya arrastrado. Señalaron que les llama la atención que el auto de Benicio tenía puesta la llave y entre las ruedas había una piedra, conocida como “taco”, que es para que el vehículo no se mueva. El rodado estaba en inmediaciones del arroyo Aratiri.
El primo del fallecido, Pablo Arce, indicó en C9n que, justo ese día, don Benicio cobró y la plata no apareció.
Desde el día de la desaparición, los familiares realizaron intensas búsquedas, pero no lo encontraron. El viernes, algunas autoridades se sumaron a la búsqueda, pero luego solo los parientes siguieron, según dijeron.
Ayer, a eso de las 13:00, encontraron el cuerpo en el arroyo Tayuazapé, en Capiatá.
Estaba por casarse
Daysi Aquino, pareja del hombre vino desde Ñeembucú para buscar al papá de sus hijos. Contó que hace algunas semanas, Benicio le había pedido que se case con él y ella aceptó, incluso tenía los anillos de alianza en su cartera.
El cuerpo del hombre fue sacado del lugar 6 horas después. Según el primo, las autoridades se tiraban la pelota y no iban a la zona del hallazgo.