El suboficial Isidro Casco Salinas, de 31 años, llegó a las 03:00 de la madrugada de hoy, sobre una moto, hasta la casa de sus suegros, ubicada en el barrio San Miguel de Capiatá, aparentemente en estado de ebriedad y sin mediar palabras comenzó a disparar a todos los que estaban ahí.
Según la policía, había 12 personas en la casa, que se encontraban durmiendo. Primeramente fue a la pieza de sus suegros, identificados como Alberto De La Cruz Riveros Benítez, 53 años, y Amalia Beatriz Caballero Portillo, 50 años, mientras sostenía su teléfono, en el que estaba en una videollamada con su señora, que está en España, comenzó a dispararles.
Luego, fue a la pieza de sus hijos Amalia Casco, de 2 añitos, y Amilcar Isidro Casco, de 1 año, y también los eliminó a balazos. Los demás integrantes de la familia, al oír los disparos salieron de sus piezas para ver lo que ocurría, pero el policía los recibió con más disparos.Una de las balas impactó en el pecho de una adolescente de 16 años y falleció; sería la cuñada del homicida.
Por otra parte, cuatro personas lograron escapar y salieron ilesas. Otras dos fueron alcanzadas por las balas y ahora se encuentran internadas, pero fuera de peligro; se trata de Lourdes Gómez Caballero de 18 años y un niño de 11 años.
Tras el horrendo crimen, el policía decidió autoeliminarse y se disparó en la cabeza. Falleció en el lugar. El mismo ya tenía antecedentes por violencia familiar.