Un policía resultó herido en la cola durante un procedimiento donde intentó evitar una tragedia familiar, en Villarrica.
El insólito caso ocurrió ayer a las 11:00 y el policía herido es el suboficial Nelson Ramón Báez, de 34 años.
El uniformado acudió junto a sus camaradas a la casa, tras recibir un llamado de auxilio en la comisaría.
La vecina María González, de 64 años, pidió a los policías que lleguen lo antes posible porque su hija estaba fuera de control, borracha y muy violenta.
Se estaba cortando
Al llegar al lugar, la señora dijo que logró controlar a su hija y que no hacía falta que ingresen a la casa.
Los policías se retiraron y minutos después la señora volvió a comunicarse desesperada.
Manifestó que su hija se estaba autolesionando con un cuchillo de cocina y que temía por su vida.
Los policías ingresaron a la casa y el suboficial Báez intentó desarmar a la joven, que ya tenía varios cortes en los brazos.
En medio del forcejeo, la mujer lo apuñaló en la nalga izquierda, y cuando el uniformado intentó quitarle el arma blanca, también sufrió un corte en la mano derecha.
Finalmente, los policías lograron reducir a la mujer y evitar que siguiera hiriéndose.
El suboficial Báez fue trasladado de inmediato al Hospital Regional de Villarrica. Los médicos indicaron que las heridas no revisten gravedad, aunque deberá guardar reposo por un par de días. Se quedará con la cicatriz del “deber cumplido”.
La mujer, por su parte, también fue llevada al hospital debido a los cortes que se provocó. Se encuentra fuera de peligro y, de momento, no quedó detenida.