Como acostumbra hacerlo todos los días, Berthold Kaethler, un alemán residente en la Colonia Neuland (Chaco), salió ayer a la tardecita a realizar algunos pendientes por la zona en su vehículo. En un tramo, cerca de una estación de servicios, le llamó la atención una caja que estaba en medio de la calle. Paró y lo revisó.
Grande fue su sorpresa al encontrar adentro 14 kilos de carne para asado fino. Sin dudar, lo primero que hizo fue preguntar a los vecinos de la zona si sabían de quién era. Ya que no aparecía el dueño, decidió buscarlo por medio de las redes sociales.
Mientras esto ocurría, Ismael Espínola, el dueño de la carne, se desesperaba, ya que estaba a muchos kilómetros y el asado era para el festejo del 15 años de su hija.
“Ismael lo compró de un supermercado y ahí cerca se le cayó, pero no se dio cuenta. No tardó mucho para que Berthold lo encuentre y ya le devolvió la carne, fue una inmensa alegría para la familia, ya que acá la carne es muy cara”, contó a EXTRA Lucio Romero, un poblador de la colonia.
Detalló que la carne de asado está a G. 40.000 el kilo en la zona y que Ismael iba a perder en total G. 576.000. “Muchos pensarían que es más fácil callar, alzar el producto, seguir yendo y comer un rico asado, pero aquí vemos un ejemplo de que los valores muy importantes no se pierden, por ejemplo la sinceridad e integridad de una persona”, destacó Romero.
En tanto, de tan emocionados que quedó tras el gesto, Ismael invitó al menonita a ir al 15 años y comer el asado.
Berthold dijo a EXTRA que a eso de las 18:30 encontró la caja y que cree que hizo lo que cualquier persona debería hacer en estos casos, ya que no es suya la carne.