En María Auxiliadora, Itapúa, todos conocen a doña Bertha Junghanns por sus bollos, chipas y medialunas.
Pero hoy su nombre suena, porque decidió vender su casa para seguir luchando por la vida de su hijo. Joel, de 28 años, quien enfrenta un cáncer complicado.
La mujer, de 60 años, contó entre lágrimas que este domingo debe viajar de urgencia a Asunción para acompañar a su hijo en un tratamiento de radioterapia, en el INCAN.
Joel, herrero de profesión, ya lleva ocho meses de quimioterapia y ahora debe seguir un proceso más largo. Su mamá tendrá que quedarse más de 30 días en la capital, pero no tiene los G. 3.000.000 que necesita para el viaje y la estadía.
“Prefiero quedarme bajo el puente, daría mi vida por mi hijo… no me importa vender la casa”, dijo llorando en radio Kokue Poty. La vivienda que ahora ofrece está en el barrio Obrero km 44, a dos cuadras de la ruta PY06.
A todo esto se suma que su esposo también está muy enfermo. Tiene Parkinson y Alzheimer, así que ya no puede trabajar.
Sale a trabajar
Toda la carga cayó sobre los hombros de doña Bertha, una mujer que desde hace años se levanta a las 02:00 de la madrugada para preparar sus productos y salir a vender, haga frío o haga calor, llueva o truene.
Mientras otras personas duermen, ella ya está amasando. Mientras otros desayunan tranquilos, ella ya recorrió media ciudad vendiendo. Todo para mantener a su familia. Pero ahora el peso es demasiado grande.
¿Cómo ayudar?
Quienes quieran aportar su granito de arena, pueden llamarla al 0986 780 321 o aportar al Banco Familiar – Cuenta 33-538820 – C.I. 1457997.
“Yo no pido cantidad. Cualquier G. 2.000 ya es mucho para mí. Tengo mucha vergüenza, si no necesitaba, no iba a estar pidiendo”, expresó.