28 abr. 2024

Con la venta de pandorgas, sus hijos lograron estudiar

Don Oliborio, el rey en el oficio hace 37 años.

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Don Oliborio y doña Natividad hicieron equipo, junto a sus dos hijos, para salir adelante armando y vendiendo pandorgas.

Daniel Ñamandú

Sentado en su silla cable en su casa de Lambaré, don Oliborio Mendieta va uniendo las tacuarillas con hilo, para el armaje de las pandorgas.

El karai se dedica desde hace 37 años al noble oficio de elaborar artesanalmente este típico juego muy popular en los días de invierno.

“Cuando mis hijos tenían 8 y 9 años les hice para que se diviertan. Cuando salieron para hacer volar, los vecinitos se acercaron, en eso mi hijo viene con un G. 200 y después también el otro con plata en mano y así comenzó todo”, contó a EXTRA el “Rey de las pandorgas”.

Toda la familia ayuda

Viendo el éxito, ya elaboraba por cantidad y los sábados los dos pequeños, cargando las pandorgas, iban a vender sobre la Avenida Eusebio Ayala y San Martín.

“Ellos luego me pedían. Salían a las 8 y para el mediodía ya vendían todo”, recordó.

Al señor, aparte de los dos hijos, le acompaña la esposa y una sobrina.

“Mi trabajo es coser la bolsa de plástico y que quede bien sujeto al armaje”, explicó doña Natividad de Mendieta.

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Daniel Ñamandú

Al comienzo solo hacía con bolsas sin diseño, luego ya venían de los clubes y hoy en día abunda todo tipo de dibujitos.

La mayor satisfacción del hombre fue que gracias a su trabajo, sus hijos pudieron terminar sus estudios y luego lograron el sueño del techo propio.

“Se compraron para sus terrenos, pagaron todo y ya se hicieron para sus casas en Ñemby”, dijo orgulloso.

Clientela en el país

Hoy tiene una clientela de Encarnación, Ciudad del Este, Pedro Juan y ciudades vecinas, que solo compran de él.

A don Oliborio le pueden hacer pedidos a su línea baja (021) 557-907 o al (0986) 718-672. Las pandorgas están a 5.000 y 6.000 guaraníes la unidad, con un descuento de 1.000 por cada una a partir de una docena.