Montse Servín contó en Twitter cómo escrachó al chofer de un micro interno que el 24 de setiembre del año pasado arrolló y mató a su madre en la esquina de su casa, en Ñemby.
La mujer relató que ayer fue a la despensa en compañía de sus dos hijos, a tres cuadras de su casa, cuando vio que se acercaba un colectivo interno y se fijó en el número de coche. “Le veo al pendejo de mierda manejando pero saben cómo? ¡hablando por celular! Y ahí exploté! Porque seguramente así estaba ese viernes entre las 14:30 y las 15:00 hs que le pasó por encima a mi Mamá, diciendo luego que NO LE VIO. Y estallé... le grité con todas mis fuerzas que deje el celular, que seguramente así fue que le mató a mi mamá”, tuiteó.
El chofer, aún con una mano sosteniendo el celular, soltó el volante y le hizo “al pelo” a Montse, encima riéndose, lamentó.
“La única forma de no ver a esta señora de casi 1.80 de estatura, en un lugar donde sí o sí suben y bajan pasajeros, y que además hay terrenos baldíos dando una muy buena visual al chofer...es que haya estado como hoy, con el celular en la mano”, manifestó.
El caso
Montse señaló que se realizaron dos peritajes y que sigue aguardando el resultado del segundo. Fue hasta la Fiscalía a preguntar si se podía pedir informes acerca del uso de la línea telefónica del chofer ese día de la tragedia y a esa hora; le respondieron que sí, pero no lo hicieron.
La víctima fue doña Olga Beatriz Quintana, de 68 años, quien murió arrollada sobre la calle Azahares y Tulipanes del barrio Pa’i Ñu.
El micro de la Línea 10 San Juan SA estaba guiado por Gerardo Giovanni Rebolledo Trinidad, de 25 años.