En las olerías de Tobatí no hay tutía. Cuando hace mucho frío se trabaja a partir de las 6:00 o las 7:00 de la mañana, pero los otros días se empieza a las 2:00. Los oleros amenizan el ambiente con música.
Uno de ellos es Francisco Jara Cosentino, quien se hizo muy conocido en las redes sociales desde que su hermana compartió el primer video suyo. En él se lo ve laburando de aquí para allá, con una sola pierna, con mucha destreza.
Don Francisco tuvo un accidente hace 12 años pero no se entregó a la dificultad y ahora lleva más de 30 años fabricando ladrillos. “Sigo trabajando en eso por mi familia y voy a seguir peleando por ellos”, dijo a EXTRA. Todos lo que le conocen están orgullosos de él y de su esfuerzo.
“Que no se rindan es lo que les puedo decir, nada es imposible, Dios sabe lo que hace, aprieta pero no ahorca”, anima a otras personas con discapacidad.
Luego del primer video viral recibió ayuda de parte de algunas personas, además de los muchísimos comentarios positivos, y por fin le incluyeron en el programa Tekoporã por el que tanto anduvo detrás. Pero sigue siendo uno de los miles que se quedó sin recibir el subsidio Pytyvõ.