09 may. 2024

Una colilla confirmó que Tillería mató a Modesto

Inéditos detalles del crimen que se condenó a muerte.

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Según Abdón, siempre tuvo dudas sobre la autoría moral del crimen. Él cree que Desiderio no fue el cerebro del asesinato.

Daniel Ñamandú.

Modesto Vázquez llevaba ocho días muerto cuando lo encontraron en su cama con 12 puñaladas y 3 tiros en el cuerpo.

De lo poco que tenía a sus 77 años, en la vivienda de la localidad de Itapé, en Guairá, faltaban un revólver y un rifle.

Con una llamada a la Facultad de Derecho de la UNA en Asunción, la policía local avisó del hallazgo a su hijo, Edgar Abdón Vázquez Fernández.

A Polaco, como se lo conocía a Abdón, le vino a la mente una conversación con su papá y particularmente un personaje.

“Un día vino y me dijo que se le acercó un señor que le ofreció a través de la magia recuperar todos sus bienes”, relató a EXTRA.

Aquel hombre era Desiderio Tillería Cardozo, un muchacho de 30 años con fama de hechicero, que por aquellos días, trabajaba en la granja de Modesto.

“Papá le dio toda la confianza porque vivía con él, le mataba ovejas. A cuerpo de Rey vivía con papá”, contó don Abdón, hoy de 70 años.

Los investigadores de la policía se enteraron así que el empleado fumaba una marca específica de cigarrillos, la misma cuya colilla se halló en la escena del crimen.

“Era el único tipo que fumaba Kent en esa época, por la colilla que dejó en la pieza, se le agarró”, mencionó Abdón.

Cinco días después del hallazgo fue detenido Desiderio y en su poder se encontraron las armas de Modesto.

Cero rencor

“Yo nunca le tuve rencor a él. No pasé con mi padre mi juventud, no tuve una relación cercana”, expresó Abdón sobre el autor del crimen.

Dijo que, incluso, la policía stronista le dio la oportunidad de liquidar el pleito acabando ahí mismo con la vida del asesino.

“Me daban toda la garantía necesaria en esa época, le metía tres, cuatro cinco balazos, pero yo nunca le tuve rencor a este señor”, insistió.

Eso, debido a que su padre (Modesto) se acercó a él ya de grande, luego de incluso negarle como hijo. “Cuando terminé mi sexto grado, me fui a su casa en Itapé, me dijo que no era su hijo, desde ahí perdí la relación con papá”, indicó.

Abdón dijo que la pena capital que ligó Tillería era porque mató para robar y que él no hizo justicia propia porque dejó en manos de la divina. “Viviendo en Tacumbú era un rey, ahora vive en la miseria”, lanzó.

Modesto perdió todo

Cuando Modesto conoció a Desiderio tenía casi nada de pertenencias y quería recuperarlas.

Según Abdón, puso todo a nombre de un señor al separarse de la mamá de sus 3 hijos porque ella inició un juicio de prestación. “Mi padre era campesino, pero tenía propiedades grandes, animales, cuando enajenó (traspasó) se quedó prácticamente con nada”, refirió.

Al enterarse que su hijo estudiaba Derecho y laburaba en el Poder Judicial en Villarrica, se acercó a él. “Después de dos o tres meses me comentó todos los bienes que dio y a quiénes”, se acordó. Agregó que una semana después le contó lo de Tillería.