Miembros de “Bala na cara”, el tercer grupo criminal más peligroso del Brasil, cuyos líderes habían sido detenidos en nuestro país, planeaban matar a un magistrado durante un partido en el estadio de Gremio de Porto Alegre, según publica la prensa del vecino país, al tiempo de reproducir crueles relatos de matanzas anteriores.
El principal implicado es José Dalvani Nunez Rodrígues, más conocido como “Minhoca”, quien responde por 68 procesos de homicidio. El mismo fue detenido en Ciudad del Este en agosto del 2016 y hoy volvió a las noticias al conocerse los terribles mensajes que intercambiaban por celular.
El otro implicado es Luis Fernando da Silva Soares Junior, conocido como Junior Perneta o Museo, detenido en mayo último en la costanera de Encarnación, pero residía con su novia en el barrio San Lorenzo de Presidente Franco. Ambos tenían cédula paraguaya y fueron expulsados hacia el Brasil, donde soportan procesos por múltiples crímenes.
Las conversaciones de Junior Perneta, que quedaron registradas en los celulares incautados a los delincuentes, justamente coinciden con el tiempo que vivió en nuestro país. En uno de los diálogos se lee que intentaron convencer a un médico para matar a un adversario hospitalizado. Pero hay otros mensajes escritos igualmente escalofriantes, según publica el diario Zero Hora:
- Tengo un pariente que hizo una mierda con una mujer casada y el marido les descubrió. Ahora (el esposo) está amenazándolo de muerte. Mi pariente está cagado. ¿Están los chicos para el servicio? ¿Cuánto sale?
- Depende, qué ¿quiere hacer?
- El quiere que desaparezca del mundo.
El grupo de sicarios en wasap
Por otra parte, los investigadores brasileños también accedieron a contenidos del “Grupo de los Leones”, en el wasap, donde los sicarios de Bala na Cara decidían ejecuciones, toma de territorios y publicaban fotos de sus futuras víctimas. Por ejemplo, habían decretado la muerte del juez Felipe Keunecke de Oliveira, quien tiene 65 procesos contra la banda criminal, incluyendo uno contra la esposa de “Minhoca”.
La policía también realizó la “Operación Gangster”, que significó el procesamiento de tres abogados que proporcionaban datos de los testigos que la organización criminal quería aterrorizar o matar. “Estoy en un buen grupo de exterminio”. escribia “Minhoca” desde Paraguay, según los registros de los celulares.
En otro de los escalofriantes textos escritos por el líder criminal que vivía en Paraguay, el hombre pide un lugar para enterrar a su rival pero aclara expresamente que no se tome ninguna imagen del finado:"Presiso um lugar ai pra emtera o contra q pegemo, sem foto nada, so emtera, já prepara o buraco” (sic).