Las redes sociales se llenan de publicaciones de mamás y papás orgullosos mostrando las libretas de sus hijos: "¡Mirá, mi hijo sacó todo cinco!” luego algunas dicen. Pero, ojo, un psicólogo advirtió que esto podría hacer más daño que bien a largo plazo a las criaturas.
“Validar logros escolares a través de las redes no es recomendable”, dijo el profesional Ariel González, quien explicó que si la única forma en que un niño recibe reconocimiento es cuando se publica en Facebook o Instagram lo que logró, va a crecer dependiendo de la opinión de los demás para sentirse bien.
“Muchas veces no se premia por el esfuerzo real del niño, sino para que el adulto reciba elogios también. Eso es peligroso”, afirmó. Según el especialista, cuando un padre o madre publica las notas de su hijo/a en redes, muchas veces lo hace esperando que le digan “qué buen padre”, “qué buena madre”, “qué inteligente tu nena”, y eso puede generar una relación de validación externa muy dañina para la autoestima del niño.
Premiar, pero con límites
El psicólogo no dice que esté mal felicitar o reconocer un logro, pero aclara que el problema es cuando se hace con demasiada exageración porque eso es como que se le está premiando por hacer algo que es su deber.
“Está bien si hay un acuerdo previo, si le prometiste que si sacaba lindas notas le ibas a regalar algo, y cumplió, bueno, se le da su premio. Pero no hace falta hacer un show”, dijo el psicólogo.
También criticó la moda de hacer una gran fiesta por cada logro básico. “Hoy día terminan el preescolar y ya le hacen colación. Luego aprueba primer grado y otra fiesta. Todo es show. Si seguimos así, el niño va a crecer creyendo que necesita ser festejado por cada cosa básica que haga, como bañarse, hacer la tarea o estudiar”.
Hijos insoportables
El experto alegó que el exceso de premiación y exposición puede generar adultos frustrados es decir “insoportables”. “Si acostumbramos a los chicos a recibir premios por cada mínima cosa, después van a crecer y van a exigir que se les reconozca todo. Van a decir: ‘¡Mirá, ya me duché! ¿Dónde está mi premio?’”, dijo entre risas, pero con seriedad.
Algunas mamás solo publican las libretas de sus hijos “bochos”, pero no de los hijos que no tuvieron buenas calificaciones, esto también criticó el psicólogo, indicando que eso puede hacer mucho más daño, ya que el niño/a se siente inferior a su hermano.