El Municipio de Serafina Correa, estado de Río Grande do Sul, comunicó al Consulado General de Paraguay en Porto Alegre el fallecimiento del paraguayo, Juan Falcón Barrios, a causa de las inundaciones que afectan la zona de ese país.
Se trata del primer compatriota fallecido tras el desastre natural, que ya se cobró la vida de al menos 90 personas y dejó 132 desaparecidos, de acuerdo a los últimos reportes.
José Martínez, cónsul en Río Grande do Sul dijo que lo poco que sabe es que el hombre fallecido es de Ciudad del Este y que hace cuestión de tres días llegó para trabajar.
“Este muchacho vino a trabajar, me parece que es una persona joven y creo que era su tercer día de trabajo. Es una circunstancia bastante penosa”, mencionó.
El cónsul indicó que, a consecuencia de las intensas lluvias, un muro que estaba al lado de la casa donde vivía se derrumbó y lo aplastó. “Era un lugar donde vivían varias personas, entre ellos algunos paraguayos y algunos habrían quedado heridos inclusive”, dijo.
Por su parte, Nelly Delgado, cónsul de Paraguay en la ciudad de Porto Alegre explicó que alrededor de 200 paraguayos estarían afectados de forma directa por las inundaciones, una de las localidades más castigadas por las crecidas.
En el estado de Río Grande do Sul residen unos 3.000 paraguayos, pero no todos ellos se encuentran en peligro, ya que viven en zonas que tuvieron un perjuicio menor, explicaron las autoridades.
El Ejército informó también que 17 mil militares, policías y agentes están operando para el rescate; 2.600 móviles y equipos; 42 aeronaves, 243 embarcaciones y un navío de multitarea y tres hospitales de campaña.
“Nunca vi algo parecido”, dijo
el Alvarenga están en el lugar del siniestro desde el sábado 4 de mayo. Ellos forman parte de los ocho miembros del Cuerpo de Bomberos de la Itaipú Binacional que fueron enviados para ayudar a los rescates.
“Dentro de todo lo que es el estado de Río Grande do Sul son 300 municipios afectados”, explicó Marín a radio Chaco Boreal 1330 AM.
El voluntario indicó que los albergues ya fueron sobrepasados y que muchas personas prefieren no salir de sus casas, pero cuando se terminan las provisiones, allí es donde piden que se los rescaten.
El bombero compara la catástrofe con tragedia del supermercado incendiado. “En mis 22 años de servicio, nunca pasé por un escenario de esta magnitud. Lo relacioné con lo ocurrido en Ykuá Bolaños”, expresó.