Fátima, Sonia, Derlis, Romina y Miguela, cinco jóvenes nativos de la comunidad Riacho Mosquito, del departamento de Alto Paraguay, no pudieron evitar algunas lágrimas de la emoción esta mañana tras cumplir su meta más anhelada: ser profesionales docentes.
Pese a todas las adversidades, como: camino en mal estado, falta de electricidad por días, falta de materiales y, sobre todo, cruzar el río Paraguay, los jóvenes no se rindieron y hoy festejaron con su toga en su ceremonia graduación, todos terminaron con excelentes calificaciones.
Los cinco era compañeros en el Instituto de Formación Docente “San Roque”, de Vallemí, ciudad que queda al otro del lado del río de donde viven. La diversidad cultural fue muy rica en la casa gracias a ellos, afirmaron sus exprofesores, quienes destacaron la dedicación de los jóvenes egresados.
Los nuevos profesores mencionaron a los medios locales que quisieran desempeñarse profesionalmente en su comunidad con la idea de que más jóvenes indígenas de la zona puedan acceder a la educación.