Cuando Sabrina Stumpfs quería entrar en una nueva relación, su ex usaba info sensible en su contra para dejarla mal parada.
“Le contaba: ‘tal hora estaba en tal parte’”, creando cizaña con su nuevo amor. Así, cayó en cuenta que su expareja nuevamente le instaló GPS y micrófono en el auto.
Según la joven, oriunda de Ciudad del Este (Alto Paraná), el 26 de septiembre del año pasado, estando aún en la relación detectó a través de su celu que su auto tenía un rastreador de la marca Apple.
Ante la relación tóxica, Sabrina le cortó a Francisco Leonardo Damián Torras Romero, gerente general de una multinacional.
“Ya no quería estar con esa persona porque me hacía tener miedo”, he’i voi la chica.
El 12 de noviembre, encontró jey otro GPS dentro de su vehículo, guardó el dispositivo y no le denunció.
Sin embargo, 6 meses después de finalizar con él, Torras Romero seguía apareciendo en lugares donde iba, hacía comentarios sobre ella en su entorno. La joven recibía versiones de que su ex sabía detalladamente sus ubicaciones en tiempo real, con quién y de qué conversaba, entre otros detalles.
Al sospechar que el tóxico la espiaba en secreto, Stumpfs acudió a su abogado Mario Sosa.
Ambos denunciaron en la Fiscalía y agentes de Criminalística encontraron el aparatito rastreador blanco de la marca Tracker, que estaba en el costado del asiento y el micrófono se encontraba en el techo del vehículo.
Mecánico implicado
Según el abogado, luego de separarse, el vehículo de Sabrina tenía un desperfecto, llevó al mecánico que era amigo en común de la expareja y sospechan que ahí le instalaron los aparatitos.
El mecánico está identificado dentro de la carpeta fiscal. “Dejó (el vehículo) por un día en ese taller y se presume que en ese momento se instaló el dispositivo rastreador”, dijo.
“Lo más llamativo es que el GPS tenía cortacorriente, o sea, tenía la posibilidad de parar el vehículo. Encender o parar el motor de vehículo y lo más grave y que configura un hecho punible es que tenía un micrófono dentro instalado”, resaltó Sosa.
El abogado afirma que el vehículo tuvo que ser desarmado para colocar el GPS. Este aparatito se alimentaba de la batería del rodado. Además, el rastreador se conectaba con el micrófono, por lo que utilizaron accesorios con alta tecnología.
El caso está en la Unidad Fiscal 1, a cargo de Carlos Almada.
Evidencias
Las evidencias deben ser analizadas, dentro del GPS había un chip que debe ser analizado a nombre de quién se encuentra.
El colmo
Sosa detalló que 10 minutos después de que llegaron al Ministerio Público para realizar la denuncia, el abogado de Torras Romero se presentó para tomar conocimiento de la causa, pese a que en ningún momento conversaron con el acusado sobre el tema, evidenciando que estaba al tanto de todo lo que ocurría con su ex.
El hombre podría ser imputado por violación a la intimidad y privacidad, he’i el abogado.
Solicitó orden de alejamiento
“Una vez, él le paga a mi niñera, que vive en mi casa, para que le cuente todo, quién viene, con quién hablo, todo lo que yo estoy haciendo. Por ese suceso, en diciembre solicité una orden de alejamiento, ni aun así no me deja en paz”, acusó Sabrina Stumpfs.
Estuvieron juntos 3 años, pero en los últimos 6 meses la relación se pudrió, ya que él le instaba GPS. “Me causó un daño psicológico y emocional enorme”, dijo ella.