15 may. 2024

El fisioterapeuta no vidente que restaura con las manos

Sampedrano se destaca en tratar múltiples dolencias del cuerpo. “Al igual que los demás compañeros tengo la misma cantidad de pacientes”, dijo.

20240415-004materialA,ph01_22552~001_51882751.jpg

Evelio Pavón se caracteriza por ser un profesional muy calificado y preparado.

Gustavo Del Puerto Rodríguez

Sus manos son sus herramientas de trabajo. Con ellas hace magia.

Evelio Pavón, es un fisioterapeuta no vidente de 43 años, que venció todo tipo de barreras y la palabra rendirse no forma parte de su diccionario.

Vive en Mariano Roque Alonso, es oriundo de San Pedro de Ycuamandyyú (San Pedro), y a los 11 años perdió la vista, cosa que lo dejó devastado.

“Según los médicos, nací con eso, o sea lo mío es congénito. Veía bien hasta los 11 años, hasta que los profesores se dieron cuenta de que iba disminuyendo la vista”, contó a EXTRA.

Cada vez que tenía lectura oral se le nublaba la vista.

“En 1991 vinimos (con sus padres) a consultar en Asunción y dijeron que sí o sí me tenía que operar porque supuestamente era la única alternativa para mantener por lo menos la vista”.

Sin embargo, quedó completamente ciego al salir del quirófano.

“Pasaron los años, dejé de estudiar durante siete años porque volvimos a San Pedro. Por cosas de la vida, en el 1997 nos mudamos a Mariano Roque Alonso y ahí me fui a un centro de rehabilitación”, apuntó.

Para Evelio fue como empezar de cero.

En 1998 culminó la primaria.

Igualdad

“Jamás me sentí discriminado, porque la mayoría no se da cuenta de entrada (de su condición), pero les explico. Por supuesto que aceptan la atención porque soy como cualquier otro profesional”, Evelio Pavón.

“En 1999 me fui al colegio Dr. Fernando de la Mora, de la capital. Hice un curso normal durante esos seis años; a los 24 años terminé el colegio y a los 25 comencé la facultad, que terminé a los 29”, mencionó.

Actualmente trabaja en el Centro de Especialidades de Salud (CESI) de IPS.

Los pacientes lo consideran un excelente profesional, incluso preguntan mucho por él en las redes sociales, porque solo quieren que él les atienda.

“Al igual que los demás compañeros estoy acá y tengo la misma cantidad de pacientes que ellos, pero muchas veces ni cuenta se dan al comienzo (que es no vidente)”.

“Se nota que soy no vidente porque uso bastón, pero el primer día, el paciente viene con su orden (los secretarios reciben y confirman) después nos traen, entonces siempre para evitar ese choque directo, entre que lea acomodo y les pongo el aparato les comento (que es no vidente)”.

Evelio contó que siempre que habla por primera vez con sus pacientes, ellos se quedan sorprendidos y con la boca abierta.

Fue capitán de la Selección para Ciegos

Es multifacético y corre como flash.

La gente que conoce a Evelio Pavón, habla maravillas de él. Además del don de curar con las manos, también tiene magia en los pies.

Evelio formó parte de la Selección Paraguaya de Fútbol para Ciegos.

Como capitán dirigió a un excelente equipo, que jugó en la Copa América del 2013.

A través del fútbol conoció a muchas personas del ámbito, que hasta ahora están en contacto con él y juntos recuerdan memorables anécdotas.