Un grupo de vecinos y amigos de la compañía Ñu Guazú, de Valenzuela, Cordillera, decidió ayudar a un poblador muy querido de la zona.
Es conocido como “Hércules”, por dedicarse a los trabajos más brutos que nadie quiere hacer hoy día, como canaletas, tajamares, pozos ciegos y todo lo que implique fuerza y sacrificio.
Hace diez días arrancaron con una misión enorme, que era construirle una casa de material, porque el señor vive en una casita de madera que está a punto de derrumbarse. Y en una cama duerme con sus hijos y nietos.
Luciano Espínola, organizador del grupo, contó que Hércules trabaja día y noche para mantener a todos, incluso a sus nietos, pero aun así “no le da el cuero” para mejorar su vivienda. La situación tocó el corazón de muchos, por lo que juntaron plata y otros donaron materiales.
Gracias a eso, la obra ya está a nivel de techo, pero todavía falta terminar el baño y equipar la casa. La familia es tan humilde que ni heladera tiene, y en total hay unas cinco criaturas de entre 3 y 5 años, que también necesitan de todo.
“Más que esto no puedo estar feliz”, se le escucha decir en un video a don Hércules.
Actividades
El grupo organizó ayer un torneo y truco para juntar fondos, pero igual apelan a la solidaridad de otras personas que desean donar cama, ropa, zapatos, cocina, heladera, lavarropas o lo que pueda servirle a la familia. “Todo suma y todo vale”, dijo Luciano.
Quienes desean dar su granito de arena, pueden comunicarse con Luciano al (0971)959-987, su alias es el: 5.555.462, número de cédula.
La meta de este grupo no termina acá porque quieren seguir ayudando a más familias en extrema pobreza, levantándoles una vivienda digna. También están abiertos a recibir aportes y más manos solidarias para las obras.