El sábado por la noche, un vecino llegó a la casa de Irma Roa (35) y le contó que en su celular le llegó el código del programa de ayuda Ñangareko, pero con los datos de ella. Le propuso entonces algo que le dejó con los nervios de punta a la mujer.
“Yo no sé cómo le pudo llegar a su número el código de la ayuda con mis datos, porque yo solicité desde mi celular, eso lo que me parece raro. Pero lo que más rabia me da es que él se quiere aprovechar de eso y me pidió que le dé la mitad de los G. 500.000 y yo no acepté”, contó Roa a EXTRA.
Lo que supone es que su vecino también solicitó la ayuda económica por el sarambi del COVID-19, pero con los datos de ella, pensando que podría retirar la plata más fácilmente. “Creo que él se fue al súper y le pidieron mi cédula y, como no tiene, me vino a decir para ir juntos, pero esa plata es de mis hijos mellizos y sabe que necesito y se quiere aprovechar de eso”, dijo la afectada, oriunda de Capiatá.
Irma contó que, semanas atrás, la hermana de este vecino estaba anotando datos de los pobladores, incluyendo el número de cédula, para traerles víveres. “Creo que de ahí sacó mi número de C.I., no puedo asegurar, pero todo es muy sospechoso”, declaró. Anunció que no aceptará que el señor se quede con la mitad de la plata.
Solución
Desde la Secretaría de Emergencia Nacional (SEN) prometieron verificar el caso y tratar de mandar el código al número de la señora.