No fue un apriete de onda, supuestamente; sino que la sextorsión entre examigas y compas de laburo en una compañía de telefonía celular, fue más bien un lío de amantes, según dijo a EXTRA el abogado Valentín Domínguez, quien lleva la defensa de Andrea C. M., detenida la semana pasada por sacarle supuestamente G. 2 millones a su compinche laboral.
Valentín contó que Andrea ya está de nuevo en libertad porque fue él mismo el que convenció al fiscal Óscar Delfino de que la denuncia de la supuesta víctima estaba un poco maquillada porque según él, Andrea no sextorsionó porque sí nomás, sino que usó como un as bajo la manga el chisme, para exigir una deuda a Sara B.
“Le debe casi G. 6 millones, pero en realidad la plata no le dio la chica como ella denunció en Antisecuestros, sino el amante. Acá no hay sextorsión, lo que hay es un lío de amantes”, tiroteó Domínguez.
El letrado manifestó que el representante del ministerio público ya tiene en su poder el celular de su cliente y que al ver los mensajes supuestamente se dio cuenta de que la cosa “no era tanto como decía la mujer”, apuntó el defensor de Andrea.
“Mi cliente tiene todas las conversaciones y las capturas de pantalla ya están agregadas a la carpeta fiscal. Ella sigue trabajando en Copaco y teniendo un amorío”, soltó Valentín asegurando que él hombre fue quien pagó los G. 2 millones que le pidió Andrea a Sara para no revelar justamente ese secreto.
“El amante al final pagó y la chica se puso en una situación de víctima. Ella cree que pudo utilizar la estructura policial y fiscal con el fin de que todo el contenido de evidencias de la relación que mantiene ahí se borre, esa fue su intención y casi le salió el jueguito”, acusó Valentín.
En su declaración ante la Fiscalía, Andrea aseguró que eran amigas y compañeras y que, constantemente, salían de compras y paseo a lugares públicos como shoppings, mercados o tiendas.
“Me decía que pague tanto su compra como su consumo y que en su momento, su pareja, de Copaco, se encargaría de devolver todo lo que yo gastaba o la misma me daría, pero no ocurrió”, dijo la chica.
Supuestamente esa fue la deuda que, de a poquito fue creciendo hasta llegar a los G. 6 millones que le reclamaba.
“Le reclamaba el pago por la deuda que tenía conmigo ya que el dinero que usé pertenecía en parte a mi pareja, que también tiene mensajes con ella”, dijo ante Delfino la chica.
Si bien Andrea fue beneficiada con medidas alternativas a la prisión, sigue ligada al proceso. Está imputada por extorsión.
La mujer de 43 años fue detenida la semana pasada en una entrega vigilada ejecutada por agentes del departamento de Antisecuestros de la Policía Nacional en el barrio Obrero de Asunción.