Hoy se cumplen tres años de la desaparición de la niña, quien entonces tenía 7 años, de su casa de la compañía Isla Alta, en Emboscada, Departamento de Cordillera.
Había ocurrido en las primeras semanas del inicio de las restricciones por la pandemia del coronavirus en nuestro país.
La primera versión fue que la nena había seguido a unas cabras, con las que siempre jugaba, y ya no volvió.
Pero, los animales regresaron unos días después y la menor de edad no hubo rastros.
Por el caso, fueron apresados la madre de la pequeña y el padrastro, un ciudadano alemán, dueño de la residencia.
Ambos fueron procesados, guardaron prisión preventiva, incluso la madre fue condenada por violación del deber de cuidado, pero ya recuperaron su libertad.
Al respecto, el abuelo paterno de la niña expresó su disconformidad con la actuación de la Fiscalía y hasta consideró que los encargados de la investigación se burlan de los familiares.
“No puede ser que una niña desaparezca así nomás de una propiedad”, expresó en la 1080 AM Monumental.
Señaló que no hay quien haga desaparecer por arte de magia. Sostuvo que es obligación de las autoridades de aclarar y decir “tal cosa pasó”.
“Sospechamos que alguien transó todo, alguien de arriba ordenó que no se muestre nada. Acá hay dinero de por medio”, agregó.
“Se burlan de nosotros”
Mencionó que eso quiere pedirle al fiscal General del Estado, Emiliano Rolón Fernández, quien le concedió una audiencia, para el martes 25 de abril.
Aseguró que hasta ahora no se pudo acceder a la carpeta fiscal, para saber los avances en la investigación.
“Nada se consiguió; pareciera que se burlan de nosotros, porque no hay nada”, dijo en guaraní, antes de agregar que “no hay resultados”.
“Acá está en juego la vida de una niña; no puede ser que las autoridades sean tan duros, que una niña desaparezca y ellos se hagan del boludo o ñembotavy (desentendido) y no se le encuentre, no saber qué fue lo que pasó con ella, eso lo que queremos saber”, recalcó.