Marly Figueredo y su esposo, Rodolfo Friedmann, quedarían libres del caso “merienda escolar”. Tras casi 3 años de investigación, la polémica denuncia terminaría en el “oparei”.
Victoria Acuña, fiscala que investiga el caso, pidió a la Justicia que desvinculen del proceso a la cuerona y al senador colorado, ya que no tienen pruebas suficientes para llevarlos a juicio.
La llamativa decisión de la agente fiscal generó polémica, ya que muchos sostienen que supuestamente Friedmann robó casi G. 2.000 millones de la Gobernación de Guairá y que “Marly se beneficiaba con la plata”.
En conversación con EXTRA, la fiscala Acuña señaló que, luego de revisar los celulares y la computadora de Friedmann, no hallaron nada que los involucre en los supuestos casos de lavado de dinero, administración por provecho propio y asociación criminal por los que fueron imputados.
“Más que arrojar elementos que sustenten una acusación, nos dan más dudas sobre la participación de estas personas”, indicó.
Muchas dudas
La fiscala alegó que los mensajes presentados como prueba por Hugo Alexander Torales, el empresario que denunció a la famosa pareja, son veraces.
“No se pudo hacer o no se pudo obtener la veracidad o que ese teléfono no se haya manipulado, no tenemos esa evidencia”, dijo.
El denunciante falleció en extrañas circunstancias en agosto del año pasado, por lo que paró varios meses la investigación.
¿Ya libres?
Acuña aclaró que, si bien ella dictaminó un sobreseimiento definitivo a Marly y Rodolfo, aún no están libres del caso, ya que el “ok” final lo deben dar el juez del caso y el fiscal general del Estado.
Escrachada
Ni bien se supo la decisión de la fiscala, la abogada y activista social Esther Roa trató de “corrupta” a la fiscala Victoria Acuña, ya que supuestamente es “especialista en blanquear a delincuentes”.
“Allanan el camino para el blanqueamiento de los delincuentes de cuello blanco”, lanzó.
Contenta
Marly Figueredo afirmó a EXTRA que está contenta por la decisión de la fiscala, pero que no tiene la paz que quería.
“La verdad siempre tiene que salir a luz más tarde o más temprano y evidentemente que esto tendría que haber terminado así, porque no había formas de probar de ninguna manera de que yo hacía lavado de dinero ni estaba metida en esas cosas”, indicó.
La esposa de Friedmann reveló que hace mucho tiempo ya le devolvieron la polémica camionetaza, pero que nunca más la usó.
La cuerona cree que esto fue un “plan” de persecución política a su marido que le afectó a ella.
“Quién borra de la memoria de los paraguayos lo que me hicieron todos estos años, quién me devuelve mi prestigio y quién limpia de la memoria de mis hijos por todo lo que nos hicieron pasar”, lamentó.
Figueredo admitió que será difícil recuperarse tras los escraches. “Me instalaban a mí como la peor basura de la sociedad. Estoy contenta porque se me hizo justicia, pero no tengo la paz que yo quería”, finalizó.