Osvaldo Caballero realizó una denuncia pública, porque hace más de dos meses fue echado del motel Cascada, de San Lorenzo (Central), y todavía no le pagan su liquidación salarial. El negocio es propiedad de los hijos del presidente del Congreso, el senador colorado Óscar “Cachito” Salomón , según datos.
“A causa de la pandemia el año pasado me quedé sin trabajo por ese motivo me tocó entrar a trabajar en esta empresa sin saber pasar todo lo que me iban hacer”, se refiere en Facebook, el joven, quien mencionó que comenzó en junio.
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En diciembre pidió un permiso por duelo, pero no le dieron, por lo que habló con una de las dueñas y consiguió la licencia. “Pero desde ese día la administradora del lugar de nombre Rosalba se tomó conmigo”,
El sábado 6 de febrero tenía que entrar a las 14:00 horas, pero le llaman más temprano para cubrir un compañero que no apareció. A llegar, estaba quien supuestamente faltó; este lo desafió a pelear y le rompió la boca de un golpe.
Caballero le contó el caso “a una de las dueñas Charlotte Salomón que estaba en el local en ese momento”.
El lunes 8, la administradora lo despidió por la pelea y le dijo que lo llamaría para pagarle lo que le corresponde, pero hasta ahora eso no ha pasado.
“Ellos en ningún momento tomaron medidas al respecto, el lunes 8 la administradora Rosalba, me pide ir de vuelta fuera de mi horario laboral, supuestamente para un careo, pero grande es mi sorpresa cuando llego y me dicen que al que despiden era solo a mi, porque yo ‘pasé su autoridad’ por haber hablado con la dueña en vez de hablar con ella, siendo que no estaba ese sábado ”, lamentó.
El joven también denunció que en dicho motel de San Lorenzo, no pagan el sueldo mínimo. “Trabajamos en un lugar insalubre ni IPS nos ponían, capaz y ya no cobre nunca pero al menos y que la gente sepa por lo que esta gente”, escribió con rabia.
Prometió gestionar
Caballero recurrió al senador Óscar “Cachito” Salomón , quien le respondió que no tenía “nada que ver con la empresa”, pero le prometió “hacer gestiones”, para que le pague lo que le correspondencia, según se lee en un mensaje enviado al legislador, cuya imagen acompaña a la publicación.
También alzó los mensajes, de texto y audio, que envió a los hijos del parlamentario, hasta principios de este mes, pero no tuvo respuesta.