Acostumbrado a recorrer las calles capitalinas desde hace 14 años, Nicolás Mareco construyó su vida con mucho sacrificio, desempeñándose como recolector de Servicios Urbanos de la Muni de Asunción.
De la noche a la mañana cambió su vida. Pasar desapercibido ahora es casi una misión imposible, y eso se lo debe a Emmanuel Adebayor. Su parecido con el togolés ya le generó muchas sonrisas y hasta le dio algo de fama.
“Desde que se dijo que el jugador iba a venir, empezaron a compararme con él, primero mis amigos, mis compañeros, luego mi familia”, contó en exclusiva a EXTRA.
Nico se levanta todas las mañanas a las 03:00 y se encarga de limpiar la ciudad con su equipo. “En medio de mis actividades la gente ya me pide fotos, yo tomo con humor, quizás es por mi cabello o tal vez es mi gemelo, mi hermano perdido”, agregó entre risas.
Desde que el refuerzo estrella del Decano llegó a Paraguay, el trabajador se volvió fanático y hasta quiere tener la oportunidad de verlo. “Ojalá pueda conocerle y medir el parecido, tomarme una foto con él y, si es posible, tener su remera”, mencionó.
SERÁ TÉCNICO
Pero de fútbol no solo tiene las rastas de Manolito, sino también el amor hacia el Deporte Rey. “Estoy cursando el segundo año para ser técnico y hasta no conseguir no voy a colgar los botines”, aseguró.
“Estoy cursando el segundo año para ser técnico, y hasta no conseguir no voy a colgar los botines”
Nico dijo que ser el Adebayor paraguayo que limpia las calles asuncenas no le avergüenza para nada. “Por el contrario, me llena de orgullo”, concluyó.