Como ya era tarde y su mamá no salía aún de la pieza, Pedro Taboada Benítez (20) entró a la habitación de su madre y la encontró acostada en la cama sin signos de vida.
Pensando que se tratada de una muerte súbita, ya que la misma llevaba enferma hace un año, llamó a la policía. Sin embargo, tras la inspección del cuerpo, se constató que alguien la mató.
La víctima fue identificada como Vilma Adela Benítez Prieto (46) y el sospechoso del presunto feminicidio, ocurrido en Minga Guazú, Alto Paraná, es el marido de la mujer, Agustín Taboada Roa (44), quien se encuentra prófugo.
El hijo contó a la policía que, el jueves a la noche, su mamá fue hasta una bodega de la zona a buscar a su papá, don Agustín, quien estaba tomando bebidas alcohólicas, y ella le reprochó eso, por lo que comenzaron a discutir.
Luego, ambos fueron juntos a la casa donde siguió la discusión y, al día siguiente, la mujer amaneció muerta y el papá desapareció.
Al principio los hijos pensaron que se trataba de una muerte natural, ya que su mamá fue diagnosticada con anemia severa hace un año, por lo que tenía que seguir tratamiento, pero no lo hizo.
La médica forense, Raquel Cáceres, inspeccionó el cuerpo y diagnosticó como causa probable de muerte asfixia mecánica por sofocación (estrangulación). La víctima presentaba moretones en la zona del cuello.
El policía Hugo Frutos, quien intervino el caso, mencionó que el sospechoso, quien tiene orden de captura por Homicidio Doloso, cargó algunas ropas en una maleta, pero la abandonó a unos metros de la casa.