Sergio Orteman no tiene ni un pelo de tonto y sabe que está en una institución donde ganar es una obligación y perder es hasta inaceptable.
La difícil victoria de 2-1 ante el Always Ready por la Libertadores trajo alivio en campamento franjeado, sobre todo porque mañana nomás ya es el clásico ante Cerro y amóntema si es que se perdía el cotejo copero.
Pese al duro escollo que lograron chulear, el entrenador se mostró satisfecho por la labor de sus ta’ýra y destacó la “rebeldía” de su equipo en momentos bravos del compromiso.
“Rescato mucho el primer tiempo, de cómo el equipo presionó, tuvo paciencia para jugar. En el segundo tiempo, ante la adversidad seguimos siendo agresivos, seguimos presionando, para que ellos no puedan jugar cómodos, porque son un equipo que juega muy bien, que está trabajado”, analizó.
Mencionó que los jugadores supieron cargar esa mochila pesada que trae consigo la obligación de ganar un partido de local en Copa, pero reconoció que estuvieron ansiosos en varios pasajes del encuentro, “sobre todo a la hora de dar ese último pase, que en vez de ser más limpio lo hacíamos muy dividido”, he’i.
Bancó a full a quien le tocó portar el brazalete de capitán, Richard Ortiz, quien encima anotó el gol del triunfo ante el elenco boliviano. “Yo creo que él está merecidamente en esta institución. Cumplió 300 partidos, que no es fácil. Las críticas no las entiendo mucho. Se les critica más a los jugadores y técnico que a los políticos”, tiró en la 780 AM.