“Soy gorda, siempre me gustó comer y mi novio ya me conoció así, de este tamaño y glotona.
Desde que empezamos a salir no me guardé nada y pedía lomito, hamburguesas y más en nuestras citas.
Pero, el caso es que ahora que ya estamos un año juntos me empieza a decir las cosas más abiertamente, sin censuras, y la verdad me está haciendo sentir muy mal.
Ofensivo
Yo me deprimo cuando no como lo que quiero y él se pasa retándome y hasta ofendiéndome muchas veces.
Me dice que cómo puede ser que coma así, que parezco un chanchito y pronto voy a ser más grande que una vaca.
Me persigue para que deje los dulces y frituras, que sabe me encantan.
A mí me molesta y me hace sentir mal.
Un tiempo traté de hacer dieta, pero al final resultó peor porque por los 200 gramos que bajé subí dos kilos en pocos días.
¿Preocupado?
Él me dice que se preocupa por mi salud y que en cualquier momento me puede dar algo si continúo así.
A veces siento que es sincero, pero otras veces creo que solo le gusta torturarme y que le importa el físico nomás ya. Antes me decía “mi gordi bella”, ¿y para qué luego se fijó en mí entonces si ya vio que soy de talla grande?
Además, tampoco me da el bolsillo para ir a consultar con nutricionista y la verdad que no me gusta luego imaginar que tengo que dejar de comer.
Venganza
Como es tan malo conmigo en ese sentido, a propósito le hago y como más frente a él.
Me molesta que quiera decidir por mi y no me acepte así como soy, así como me conoció un día y se enamoró de mí.
Pero después me arrepiento de nuevo y pienso si hay necesidad de ser así con él o si en verdad está teniendo razón.
Mi hermana, que también es rellenita, me dice que seguramente tiene otra y por eso es que ahora me critica tanto. Pero la verdad que yo no creo que pase por ahí porque en otros sentidos nos llevamos demasiado bien, hasta que aparece el tema de mi peso.
Bajo amenaza
Andábamos pensando ya en dar el siguiente paso y formar una familia juntos, pero ahora ya lo dudo porque me dijo que tengo que bajar de peso o me va a dejar.
Yo creo que sí le preocupa mi salud y también sé que quiere presumir una novia flaquita, pero no entiendo porque él ya me conoció así y me cuesta dejar la comida.
¿Qué me aconseja?”