Sin sufrimientos, ni sustos Cerro Porteño derrotó 1 a 0 al Diablo rojo colombiano y avanzó como segundo del Grupo H detrás de Atlético Mineiro, a los octavos de final de la Copa Libertadores.
El Ciclón se sacó la presión de encima a los 5’ con una jugada que se originó desde la banda izquierda donde Santiago Arzamendia colocó el centro hacia la derecha para Enzo Giménez quien luego de armar una pared con Robert Morales dentro del área, cruzó el remate por abajo sacudiendo el arco del América de Cali.
El tempranero gol condicionó el resto del trámite porque el equipo de Chiqui Arce era consciente de que el rival necesitaba dos tantos para pasar. Por eso decidió replegar sus líneas y dejó que los cafeteros monopolicen la pelota arriesgadamente, aunque estos nunca supieron poner contra las cuerdas al local. En el primer tiempo le patearon un par de veces a Jean Fernandes que como en toda la Copa demostró ser un guardián confiable y seguro.
La postura azulgrana continuó siendo defensiva en el complemento y todo lo que hacía el conjunto escarlata de media cancha para arriba era demasiado anunciado y fácil de resolver para Patiño, Pulpito y compañía.
Eso sí, a Cerro le costó una enormidad generar otro ataque decente como el de Enzo en el arranque del cotejo. Lo más rescatable fue una acción aislada del propio Giménez que a los 61’ probó un remate no tan potente a las manos del arquero. En los minutos finales ni las subidas del portero del América para los córner aprovechó el Ciclón para decorar el resultado con el segundo. Lo importante es que el equipo paraguayo clasificó.