Walter Bower, exministro del Interior, quien enfrenta un proceso por hechos de torturas contra los policías Alfredo Cáceres y Jorge López, durante el gobierno de Luis González Macchi, aseguró hoy en conferencia de prensa que nunca chicaneó la justicia.
El juez Gustavo Amarilla había ordenado el arresto disciplinario por 48 horas de Bower, porque durante 17 años presentó chicanas para que el proceso no avance. “Este proceso es una manifestación de venganza política cobarde. Yo parto de lo que conozco y no conozco casos de torturas ni abusos. Y si quieren saber lo que se siento sobre esto deben entrar en mi mente y mi corazón”, expresó el exministro.
Bower recordó al exvicepresidente Argaña, coincidentemente con la fecha en que lo mataron hace 19 años, utilizando su frase: “Creo y confío en Dios”.