Araceli Benítez, sus dos hijos pequeños y uno que está en camino, vivieron momentos muy duros al no tener un techo. Hasta que hace poco se viralizó que usaban como casa un auto abandonado y solidarios se movilizaron para ayudar a la familia.
Ayer a la tarde (jueves), los alumnos de la Escuela Taller Municipal de Encarnación entregaron una casita recién construida a la familia.
Los estudiantes, con la ayuda del intendente de Encarnación, Luis Yd y unas empresas de ventas de materiales de construcción, pusieron su granito de arena para cumplir el sueño a la humilde familia.
Araceli, sus hijos y su pareja quedaron en la calle, tras ser echados por su suegra. Durante 9 meses, la familia vivió en el auto abandonado y sobrevivía gracias a los vecinos.