30 abr. 2025

Quedó sin su vestido a días de su casamiento

Ahora buscará uno para alquilar. No le hicieron el diseño que pidió y la trataron de gorda.

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Al cambiar de diseño, envió como está en la imagen, pero le hicieron totalmente diferente.

Después de que su novio le propusiera matrimonio, Luly Cabrera comenzó con los preparativos de boda y lo primero que hizo fue elegir un diseño para su vestido de novia y un local dónde confeccionar a su medida.

Eligió un local llamado “La Reina Ester”, donde le iban a hacer así como la muestra.

“Yo llevé dos diseños, el primero me dijeron que iba a costarme entre G. 10 y 13 millones, por lo que desistí y elegí el segundo diseño, que me costaría G. 3.800.000. Todo iba bien hasta que llegó el día de prueba”, contó a EXTRA la novia.

Dos semanas después del pedido acudió al local para probarse y quedó decepcionada porque no era el diseño que había pedido. “Parecía vestido de quinceañera de la época de mi abuela. Le reclamé que no es el vestido que yo quería ni la tela y me discutió a muerte que sí era la tela y el diseño, solo que a mí no me va ese modelo porque estaba gorda y mi cuerpo no da para ese diseño”, lamentó.

Ya medio harta de indicarle que estaba subidita de peso, le dijo que pare, que ella sabía bien que estaba gorda y ahí cambió de actitud la dueña del negocio y quedaron en hacerle otro diseño, El primero que había elegido, pero para que no le cueste los G. 13.000.000 le dio a elegir otra tela.

Pensando en que iba a encontrar el mismo diseño que envió, fue el miércoles a probarse y la historia fue casi la misma. “No era el diseño que prometió hacer, le indiqué algunos ajustes que quería, pero ella hacía su voluntad otra vez, por lo que ya aceptaba todo lo que me decía, menos que corte la manga, que también quería hacerle”, indicó.

Ella no quedó conforme con el atuendo y su futuro marido sintió eso, por lo que le preguntó qué pasaba. Al contarle, le dijo para que hablaran con la señora y que lleguen a un acuerdo, pero eso no pasó.

“Mi novio le pidió que nos devolviera la plata por lo menos la mitad, ya que G. 2 millones ya le entregamos, incluyendo la seña del vestido de mi hija, pero la señora se enojó más y nos trató muy mal y ahora no tengo vestido de novia. Voy a buscar uno para alquilar nomás ya”, dijo.

El local de La Reina Ester se pronunció en las redes sociales y negó que haya tratado mal y mucho menos que la haya tratado de gorda. “No es cierto del supuesto improperio sobre la imagen de la clienta. Solo se le dio un asesoramiento de imagen”, dijeron los responsables.