26 abr. 2024

“Para un hombre, una demanda de violencia es muy pesada”

Acusó a su ex por ser la violenta pero no le hacen caso. Ahora tiene en su contra prisión domiciliaria, problemas de salud, amenazas y quedó sin trabajo, según alega.

Óscar Mosqueda aseguró que le denunció por violencia a su ex, Perla Flores, tras una discusión en enero del 2021, pero no corrió su caso en la Fiscalía. Ocurrió lo contrario ya que fue él el que terminó preso por violencia doméstica. Ahora tiene prisión domiciliaria.

Mencionó que le perjudicó muchísimo la acusación de la abogada de su ex, María Muñoz, quien le trató de “abogado mau”.

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“Habla sobre mi título, sobre supuesta estafa que yo hice, sobre violencia familiar”, mencionó a EXTRA.

Afirmó que la abogada ejerció presión a través de las redes sociales contra la fiscala Otilia Aguilera de Fernando de la Mora. “Decía que la unidad fiscal no trabaja, que la fiscala no está y después de eso, la fiscala me imputa”, aseguró.

Respecto a la foto donde supuestamente él aparece jugando fútbol y violando su prisión domiciliaria, dijo que su ex le insistió a un testigo para que hable en su contra.

Mosqueda dio a conocer su título de abogado.

Mosqueda dio a conocer su título de abogado.

Gentileza

“Para que me revoquen mi permiso de trabajo, yo ahora estoy sin trabajar y me afecta muchísimo el hecho que hayan puesto ‘abogado mau’. Tengo título de abogado reconocido por el MEC, tengo certificado de estudios visado por el Ministerio, yo no falsifiqué nunca ningún título. La situación de abogado no se da por estar matriculado”, apuntó.

Manifestó que él es abogado por ser Licenciado en Ciencias Políticas con un Posgrado de Pedagogía Universitaria y que puede enseñar Derecho.

“Le llaman a mi cliente, le dicen que yo no tengo título, que yo soy un abogado mau y yo me paso diciendo que no es así. Yo soy abogado asesor en donde yo les asesoro a mis clientes, no estoy litigando porque mi matrícula gracias a este caso y esta abogada se me bloqueó”, remarcó.

Sostuvo que le agarraron varias enfermedades a causa de este conflicto y que recibe amenazas de muerte de un número desconocido.

“Estoy defendiéndome como puedo. Para un hombre, una denuncia de violencia es muy pesada. No hay ley que nos ampare a nosotros”, concluyó.