El sueño de Milán, de conseguir un donante de corazón, moviliza a médicos, ciudadanos y familiares.
El niño lleva cinco meses conectado a un corazón artificial y espera a un “ángel” donante hace dos años.
La búsqueda es urgente y dolorosa ya que varias veces perdió la oportunidad de recibir el órgano vital.
El pequeño de sólo cinco años grabó un video que fue compartido por los propios médicos del Hospital General Pediátrico Niños de Acosta Ñu.
“Hola gente, soy Milán y yo cumplo 5 meses en el hospital con un corazón artificial. Yo ya quiero salir de acá e irme a jugar en casa con mi hermana e irme en la escuela con mi amiguito Elián. Acuérdense que donar órganos salva vidas”, dijo el niño desde la camilla del hospital.
Falta conciencia
La Dra. Nancy Garay, cardióloga pediatra del Acosta Ñu, reveló que varias familias se niegan a donar los órganos.
“Sólo esta semana dos familias le dijeron NO a Milán”, señaló la doctora al compartir el video en sus redes sociales.
La cardióloga apuntó que se presentaron dos posibles donantes compatibles: de la misma edad y del mismo grupo sanguíneo, pero los familiares no accedieron a la donación.
Garay explicó que el donante debe tener un diagnóstico de muerte encefálica.
“La muerte encefálica no tiene posibilidad de revertirse. No culpo a los familiares que se niegan, pero creo que la situación y la posibilidad de salvar vidas debe ser bien comunicada”, señaló.
El tiempo es oro para Milán. El niño ya fue intervenido tras la acumulación de líquidos en sus pulmones.
La larga espera lo pone en riesgo de contraer otras enfermedades debido a sus defensas bajas y la alta exposición a bacterias y virus.
Andrea Ovelar, mamá del nene, señaló que anteriormente cuatro familias también se negaron a donar. “Yo más que nadie entiendo el dolor de ver sufrir a un hijo. Milán tiene muchísimas ganas de seguir disfrutando de su niñez. A pesar de todas las dificultades que nos toca vivir diariamente, nunca perdió las ganas de vivir”, indicó.
Seis niños esperan un corazón
En total son seis los niños que se encuentran en la lista de espera de un donante de corazón. Al igual que Milán, una adolescente de 14 años está conectada a un corazón artificial.
La Ley Anita (2019) determina que todos los mayores de 18 años son donantes de órganos, al menos que firmen una negación ante el Instituto Nacional de Ablación y Trasplante (INAT). En caso de niños, los padres deben autorizarlo.