Un guardia de seguridad quiso aprovechar su día libre para pasar bien con la patrona onda romántico. Asadito, cerveza y buena música para un lunes por la noche.
Era un buen plan para revivir la pasión, ya que casi no se quedaba en su casa, pero ocurrieron cosas... Mientras él preparaba el asado, prendió el equipo para escuchar música, todo bien ko iba hasta que amóntema el asado.
Él terminó preso. Se trata de Modesto Ramón Servín González, de 32 años, del barrio Che La Reina de Ciudad del Este.
Su celular
Modesto indicó que ya estaba preparando el asado y su pareja Carmen S. (43), le pidió su celular para cambiar la música que escuchaban por bluetooth y él con total confianza el dio su teléfono. Y ahí el diablo metió la cola.
Mientras lapa estaba buscando un ballenato romanticón llegó unos mensajes tras otro en el WhatsApp de su concubino y ella sospechó que no era “Juan mecánico” ni su jefe. Así que abrió y leyó los mensajes y se desató la furia. Su mujer explotó de los celos, se levantó y le metió dos tongos en la cara y tiró el celular en un desagüe.
El señor no negó que le empujó a su mujer para separarse, pero aseguró que no la golpeó.
Sostuvo, que desde marzo pasado conviven en el inquilinato y que su mujer tiene 6 hijos que viven con la expareja.
Contó que el domingo tuvo una discusión con su mujer y que está lo agredió y se fue a la casa de su ex y el lunes volvió y por eso hizo el asado. “Yo no soy celoso, pero ella sí” dijo.
Por su parte, la víctima dijo al comisario Alexander Mendez, que es la segunda vez que le golpea y que le amenazó de muerte.
Lío por celos mutuos
Martín Delgadillo Núñez (35), con antecedentes por caocción y abuso sexual y con orden de captura por incumplimiento al deber alimentario, fue apresado.
Supuestamente golpeó en la noche del lunes a su pareja, C. M., y a su hijastra de 16 años, en el barrio Santo Domingo de Minga Guazú, Alto Paraná.
Martin dijo que se discutió con su pareja e hijastra, que lo agredieron, he’i. Contó que el lío fue porque su mujer fue celosa sin razón. La mujer declaró que Martín llegó borracho y la ataco por celos. Su hija se metió y fue agredida.
Un terrorífico ataque
La fiscala Natalia Montanía, de Hernandarias, Alto Paraná, imputó a un hombre de 32 años por violencia familiar y coacción y pidió su prisión.
El 16 de agosto pasado, en un departamento del barrio San Ignacio, el tipo habría agredido físicamente a su pareja, de 31 años. La víctima declaró que fue insultada, arrastrada del cabello, mordida y golpeada. Tuvo un corte en la frente que requirió cinco puntos de sutura, además de hematomas en ojos. El hombre también destruyó su celular, la tuvo privada de su libertad por varias horas y la amenazó de muerte.