28 mar. 2024

Intentó matar con un hacha a su exsuegra, luego se puso a orar y le dijo “Dios te ama”

El supuesto autor llegó a la casa y destrozó todo lo que encontró a su paso.

Los ladridos de sus perros y un fuerte golpe desde el garaje de su casa alertaron a Liliana Vargas quien reside en Barrio Obrero de Pilar, Ñeembucú. Eran cerca de las 3:30 de la madrugada de este miércoles cuando el exnovio de su hija, identificado como Mathias Acosta, llegó a bordo de un auto supuestamente robado, saltó por el portón y con un hacha que encontró en el lugar comenzó a destruir todo lo que había. Aparentemente su intención era atacar a su exsuegra quien estaba sola con su hijita de tres años.

“Él entró por el portón de enfrente, los perros empezaron a ladrar y yo pensé que se estaban peleando con los gatitos porque tengo tres gatos, me desperté y presté atención, no había gritos ni nada y después ya escuché los hachazos ", refirió la doña quien incluso pensó que eran ladrones.

El joven estaba descontrolado y luego amenazó a la mujer.

“Empezaba a gritar ‘te voy a matar, te voy a mandar junto al señor’ ,comenzó a hablar todo raro no sé en qué idioma lo que hablaba, también se puso a rezar, me dijo ‘Dios te ama’ y comenzó a hachear las puertas”, señaló la mujer.

En un intento desesperado, Vargas bloqueó las demás puertas y llamó al 911. El joven permaneció en la casa cuando llegó la patrullera; durante 25 minutos intentó entrar y no lo logró. El hecho fue registrado por las cámaras de circuito del lugar.

La víctima mencionó además que el muchacho era muy violento con su hija y por eso le dejó, según le comentó. “Ella me dijo que él estaba loco y le seguía a todos sus amigos en Instagram y por eso le bloqueó por todas partes, pero tampoco le tomé importancia, no sé por qué reaccionó, nunca pensé que iba a llegar a esto”, contó

El supuesto autor además de romper todas las puertas también destrozó los vehículos que se encontraban en en el estacionamiento. La policía trasladó al joven hasta un hospital, estaba muy alterado y lo tuvieron que sedar. La víctima dijo que teme por su vida y pidió justicia.

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