11 nov. 2025

Imputaron a dos mujeres con el mismo nombre y llevaron a la inocente

La señora fue a renovar su cédula, la esposaron, encapucharon y llevaron a Villarrica por un delito que no cometió.

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Marta Maidana de Martínez, víctima.

NPY

Una mujer de 63 años fue a renovar su cédula de identidad y terminó detenida por un caso de invasión de inmueble que no cometió. El trámite se transformó en una pesadilla burocrática y judicial para Marta Elizabeth Maidana de Martínez.
“Para mí fue una pesadilla. A mis 63 años, yo soy química industrial, docente, jubilada, tengo mi marido enfermo y encima me imputan, me quedo en la comisaría un día y al día siguiente me llevan a una comisaría de Villarrica. No tenía que ser ahí y me llevaron después a la Fiscalía”, contó la señora a NPY.

Cómo sucedió todo

Marta se presentó Identificaciones de San Lorenzo para renovar su cédula vencida. Ahí le informaron que tenía una orden de captura vigente. Fue esposada, encapuchada y llevada a la comisaría 1ª de San Lorenzo sin explicaciones.
Al investigar, sus familiares descubrieron que la agente fiscal Noelia Soto Godoy (de Villarrica) había imputado a dos mujeres con el mismo nombre, Marta Elizabeth Maidana y Marta Elizabeth Maidana de Martínez, en una causa de invasión de inmueble, sin verificar correctamente la identidad. La causa se originó el 19 de febrero de 2021, cuando la fiscal Soto y el asistente fiscal Rodrigo Insaurralde fueron al inmueble invadido (propiedad de la Universidad Nacional de Villarrica) en Villarrica. Ahí fueron atendidos por María Maidana, quien explicó que en el lugar vivían siete familias en condiciones precarias. Entre ellas residía Marta Elizabeth Maidana, hermana de María.
Aunque el nombre coincidía, nunca se cotejaron los documentos personales. La fiscal terminó imputando a ambas mujeres, a pesar de tener números de cédula distintos.

La detención errónea

La imputada detenida (Marta de Martínez) no fue notificada ni llamada a declarar jamás. El 12 de enero de 2022, un ujier se presentó en un domicilio atribuido a ella en Villarrica y afirmó que le leyó la imputación, le entregó copia y le pidió firmar, algo que ella negó rotundamente. Todo apunta a que alguien se hizo pasar por ella y firmó en su nombre.
Ante el caso, la fiscal adjunta de Guairá, Natalia Fuster, ordenó al fiscal de turno que solicitara el levantamiento inmediato de la orden de detención, ya que la Marta detenida vivía en Asunción y no tenía relación con el hecho suscitado en Villarrica.
No obstante, el comisario principal Óscar Luis Cuevas Belotto, en su momento jefe de la comisaría 1ª de San Lorenzo, se negó a liberar a Marta. Alega que el comandante de la Policía, Carlos Benítez, también estaba al tanto.
Pasó la noche en la comisaría y, trece horas después de su arresto, fue trasladada a Villarrica, donde el juez Derlis Duarte decretó el levantamiento de la rebeldía y recuperó la libertad.