Una joven invitó a su nueva amiga a un bar asunceno, donde pasó lo peor. Fue dopada por un hombre que la manoseó y luego la golpeó brutalmente.
G.M. denunció en la Comisaría 3ª Metropolitana y en la Fiscalía lo sucedido en el Bar Wolf, ubicado sobre la calle Herrera.
Las chicas salieron a pasear en bicicleta. Comenzó a llover y G.M. propuso brindar por el reciente cumple de quien la acompañaba.
Al entrar al bar la chica saludó a su amigo, quien estaba compartiendo con otros 3 muchachos. G.M. no los conocía, pero aceptó sentarse junto a ellos. Más tarde, llegó el novio de la amiga y G.M. quedó un poco sola.
La joven se levantó para buscar más cerveza y un hombre, Juan Silva, supuestamente le tocó la nalga. Ella se molestó, pero no reaccionó. Ya empezaba a sentirse rara.
De un instante a otro, se quedó dormida y se cayó de la silla. Sintió malestares y fue al baño a vomitar. Juan la siguió. Forcejeó con él para que la deje sola y, supuestamente Silva la tomó del brazo y la tironeó hasta la calle. “Me defendí y él me pegó dos veces en la cara. Me rompió la nariz, quiso noquearme”, dijo. Los demás la llevaron al baño a limpiarse la sangre y Juan huyó. La subieron a un auto y la dejaron frente a su casa medio inconsciente.