Alicia Fernández, de 37 años, fue encontraba muerta en su casa, por su hijito de apenas 5 años. Al lado del cuerpo de su mamá había un celular que el valiente niño agarró para llamar a sus familiares, que llegaron rápidamente al lugar y dieron aviso a las autoridades, según manifestó el comisario Ricardo Borja.
El hecho ocurrió en el Barrio San Nicolás de San Juan del Paraná, Itapúa, entre la noche del martes y madrugada del miércoles. La víctima presenta rastro de haber sido estrangulada, según los primeros reportes.
El principal sospechoso es la expareja de la mujer, un policía que presta servicio en la División de Investigaciones de la Policía Nacional, identificado como el Suboficial Ramiro Rodas. Según los familiares de la víctima, siempre amenazaba a la mujer con matarla y luego suicidarse. Ayer el tipo vino a la casa para intentar retomar la relación, ya que se habían separado, justamente por lo violento que es el hombre.
Según el comisario Borja, ayer él estuvo hablando con el uniformado, ya que hace unas semanas había dado positivo a la prueba del Covid-19 y le avisó que hoy debía pasar por el hospital para que le den el alta médica. Hasta el momento no se sabe nada de él y tiene el celular apagado.