Para Osvaldo Centurión, no hay obstáculos que le impidan salir adelante. Sin pensar dos veces, montó un en , con el que ayuda a sus con la meta clara de darles una mejor calidad de y cumplir otro sueño: tener una casa digna.
Su historia tiene un pasaje triste. Hace 10 años, su pareja abandonó la casa dejándole a los dos hijos de ambos, uno tenía 1 año 11 meses y el otro de 11 meses, todavía en periodo de lactancia.
“Cambió mi vida 360 grados. Los dos eran bebés y tuve que quedarme a dedicarles todo el tiempo durante sus primeros años”, recordó en charla con EXTRA.
Hoy, sus retoños van al séptimo y quinto grado, y se van abriendo caminos gracias al esfuerzo y ejemplo que les da su padre.
Las noches en vela al cuidado de los menores le sirvió de inspiración y fuerza. Don Osvaldo armó un negocio que le resultó rentable como para ganarse el pan de cada día.
El emprendedor está bien equipado para cualquier acontecimiento como fiesta de cumpleaños, y para ello cuenta con máquinas para hacer pororó y algodón de azúcar, un carrito especial donde vende pancho y superpancho y una plancha para hamburguesas.
También tiene un “motopancho” que suele hacer trabajar en diferentes actividades por el centro de la ciudad.
Así como le pone garra a todo lo que hace, confesó que a veces le cuesta un poco movilizarse, pero gracias a la ayuda de un amigo que tiene un motocarro, lleva las máquinas hasta donde es contratado para ofrecer sus servicios.
Al guapo “papá luchón” siempre le gustó el trabajo y para sacar adelante a su familia no tiene vergüenza, es más, reiteró que es capaz de trabajar donde sea.
Sin embargo, es consciente de que todo sería mejor si recibiera apoyo y aprovechó para lanzar una crítica a las autoridades. “No ayudan a los emprendedores, a la clase trabajadora que quiere mejorar, siempre a nosotros nos cuesta, pero a la hora de pedir votos son los primeros en acercarse y así ya no se puede vivir en este país”, expresó.
Si quieren contar con sus servicios pueden contactar al (0982) 464 293.