28 mar. 2024

Denunció que su propio papá abusó de ella y su hija

Una mujer contó el calvario que vive tras recibir constantes amenazas del supuesto autor, que está preso en la Agrupación Especializada.

Víctima

La joven madre teme por la vida de sus papás adoptivos, por la de su hija y por ella misma.

Investigación 365

“Cuando yo le conocí a él tenía 13 años y fue lo peor que me pasó en la vida porque él me destruyó la vida y ahora a mi hija”, comienza relatando la joven madre.

Contó que fue adoptada por una familia, que luego decidió que era tiempo de que conociera a su progenitor. “Todo fue en contra de mi voluntad”, agregó. El papá, que es un policía jubilado de 58 años, nunca quiso reconocer a su hija extramatrimonial. Lo peor de todo es que, según la mujer, lejos de brindarle cariño y protección le arrebató la inocencia.

“Abusó de mí en varias oportunidades, pero no denuncié por miedo”, indicó. El silencio cómplice, con el paso del tiempo se convirtió en el martirio de la víctima, ya que años después a su hija le pasó lo mismo.

“A mi hija de 12 años él la manoseaba, un día la llevó a un motel y ahí abusó de ella. Era amenazada y manipulada constantemente. El señor aprovechaba que yo estaba en el trabajo para ir a mi casa. Mi hija se encerraba y una vez rompió la ventana para poder entrar”, relató al portal Investigacion365.com

Cuando por fin se llenó de coraje la adolescente, decidió contarle a su mamá lo que pasó, allí la mujer también se armó de valor y lo denunció.

“Yo quería algo diferente para mi hija, ambas soñábamos con otras cosas y ahora ella está sufriendo demasiado”, expresó.

El proceso sigue su curso, pero la víctima señala que teme por su vida y la de su hija ya que desde la prisión, el hombre la amenaza constantemente.

“Yo sabía que firmaba mi sentencia de muerte, que no importa el tiempo, él algún día me va a matar” señaló la denunciante.

Comentó además que en una oportunidad dos personas encapuchadas ingresaron en su vivienda de la Paloma del Espíritu Santo, Canindeyú, y amenazaron con matar a sus padres adoptivos, aseguró que desde ese día, 13 de octubre, no puede dormir ni alimentarse bien.

“Ahora la amenaza es para mi familia y por eso decidí hablar, temo por la vida de mis papás, espero que la justicia me ayude a protegerlos, aunque es muy difícil porque la justicia está a favor de él. Quiero dejar constancia de que si nos pasa algo, él es el único culpable de lo que va a pasar”, remató.