26 abr. 2024

Se van a dormir a otro lado por culpa de bares que hacen de discoteca

No dejan dormir a un vecindario. Los lugareños se reunieron hasta con el comandante de la Policía Nacional para quejarse.

La música suena no solo como para hacer vibrar las paredes, también se encarga de espantar a los vecinos.

Tres locales prácticamente pegados uno al otro se convirtieron en el dolor de cabeza más grande de un vecindario en San Lorenzo.

“La dueña de un local de polarizados tiene también su casa ahí, los fines de semana va a su quinta para descansar porque no soporta el ruido”, comentó a EXTRA el subcomisario Edgar Ramírez.

El uniformado explicó que la cuestión parte de que, para la comuna sanlorenzana, estos locales deberían funcionar como bares, pero pasando la medianoche todos se convierten en pistas bailables.

era onda tranqui

“El ambiente fue creado para sentarse, picar algo, compartir, escuchar música como en lugar abierto. Para la discoteca la infraestructura tiene que ser diferente, todo cerrado y con regulador de sonido”, detalló.

Por ello, el miércoles último, los vecinos del barrio San Francisco se reunieron con el mismísimo comandante de la policía, Walter Vázquez, y con el director de Policía del área Central, Crio. Ramón Morales para que se tomen cartas en el asunto.

“Con ellos se organizó para este procedimiento porque los vecinos no pueden descansar”, indicó.

Para ello, pidieron a agentes de Criminalística que apoyen con un equipo de sonómetro calibrado para medir los niveles de los decibeles de cada local.

El subcomisario afirmó que, según la ley 1110 de polución sonora, para las zonas residenciales lo permitido es de 45 y en el casco urbano de 55 por la noche. Todos los locales mantenían por sobre 90.

Uno de ellos, alcanzó 103,4 el sábado y 102,3 el domingo, durante la madrugada.

DECIBELES MEDIDOS

Sábado

La Pachanga: 96,0

Territorio Chopp: 92,3

Puerto Chopp: 103,4

Domingo

La Pachanga: 99,1

Territorio Chopp: 98,0

Puerto Chopp: 102,3

Tomadores callejeros

El subcomisario comentó que otro akãrasy para los vecinos son los tomadores callejeros que crean disturbios durante la madrugada.

En grupos llegan hasta el frente de los bares y en lugar de entrar se quedan en la vereda con sus conservadoras, pirateando la música.

“Siempre invitamos a la gente que se retire con su bebida, le explicábamos que está prohibido por la ley 1642”, refirió Édgar.

Agregó que los controles seguirán haciendo durante por lo menos uno o dos meses más.

“Para que la gente se acostumbre, para que sepa”, apuntó.

El sábado fue demorada una decena de farristas callejeros y el domingo trece.

Además de los tomadores callejeros, fueron llevadas a la comisaría 41 personas que no tenían cédula. Tras confirmar su identidad fueron liberados. Tres quedaron detenidos por tener cuentas pendientes con la justicia.

DETENIDOS

Sábado

10 por chupar en la calle

20 por no tener cédula

1 por captura pendiente

1 por violar arresto domiciliario

Domingo

13 por chupar en la calle

21 por no tener cédula

2 por captura pendiente