Habló sobre el caso de Alexa y por primera vez contó que cuando era niña un sacerdote la besó. Pidió a las mujeres no quedarse calladas y dijo que, si no hacen la denuncia, sale ganando el agresor.
El religioso mencionó que no entiende cómo los faranduleros llegan a mil visualizaciones y ellos no. El apasionado por las mujeres con calza pidió hacerle caso al sacerdote para mantener la fe