El expresidente y actual senador Fernando Lugo, quien había sufrido un accidente cerebrovascular (ACV), el pasado 10 de agosto, seguirá un tratamiento de rehabilitación en Argentina, según su médico de cabecera y colega suyo en el Congreso, Jorge Querey.
“La familia tiene muy avanzadas las conversaciones con la gente de la clínica Fleming, de Buenos Aires, que es una institución de una referencia mundial importante, con respecto a rehabilitación de pacientes de estas características”, dijo hoy el legislador a periodistas, al informar sobre el estado de salud del también exobispo de San Pedro.
Agregó que la decisión de trasladar a Lugo al exterior se tomaría “entre hoy y mañana”, adelantó Querey, quien señaló que “este el momento más importante para esa rehabilitación”, dando a entender que el viaje ya se estaría realizando esta semana.
Sobre el tiempo que duraría la rehabilitación, el parlamentario fue contundente al afirmar que no hay “ninguna posibilidad de predecir” y que todo dependerá de “cómo vaya reaccionando a los diferentes estímulos”.
Lugo “sigue en UTI (unidad de terapia intensiva) y hay que sacarlo; por eso, estos pacientes hay que sacarlos de terapia intensiva, solo que para eso se requiere de una organización en la rehabilitación”, explicó.
“Él está vigente, es decir, se despierta, por momentos, y lo que hace unos días, que no tenía una conexión, una interacción con el entorno, ahora está comenzando a tener; es decir, cumple órdenes simples, etcétera, y eso es muy positivo”, resaltó.
Ante una consulta sobre si Lugo ya comenzó a hablar, Querey no quiso responder, “por una cuestión de ética médica”.
Fernando Lugo, quien fue anotado como precandidato para el Senado por el Frente Guasu, había sufrido ACV en su oficina del Congreso, de donde fue llevado de urgencia, al sanatorio San Roque de Asunción, de donde lo derivaron al sanatorio Migone, donde quedó internado en terapia intensiva.
El 22 de agosto, 12 días después del evento, el paciente abrió los ojos, según había informado Querey.