Moisés le advertirá a Ramsés que la peor plaga de Dios caerá sobre Egipto.
Las hebreas preparan comidas para ayudar a los egipcios, quienes sufrieron las plagas. Al ver la comida, Nefertari va y la prueba pero, al enterarse de que fue una donación de los hebreos, la escupió. Aseguró que no aceptará las limosnas del pueblo de Moisés. Zafira se molesta con los hebreos que se burlan de las desgracias de Egipto. Ramsés exige la reconstrucción de su pueblo.
Martes:
Egipto se oscurece por completo y el miedo se apodera del pueblo de Ramsés. En medio de la oscuridad, el faraón cae al suelo y suelta maldiciones. Esta nueva plaga afecta también a los hebreos, que deben prender antorchas para poder ver por dónde van. Ramsés queda sorprendido ante la solidaridad mostrada por el pueblo de Moisés.
Miércoles:
Nefertari pidió a Gahiji que vaya a la villa de los hebreos para buscar comida. Ramsés se molestó al saber lo que hizo su esposa. Moisés celebrará bodas en la villa de los hebreos. El faraón se pregunta por qué sus dioses lo abandonaron. Además, mantiene una fuerte pelea con su esposa. Nefertari intentará calmar a su esposo.
Jueves:
Volvió la claridad del día en Egipto. Moisés le preguntará a Ramsés cuándo sus dioses han demostrado su poder, pero el faraón insistirá diciendo que la nación más poderosa es Egipto. Muy preocupado, Moisés le advertirá a Ramsés que ya no desate la ira de Dios. Furioso, el faraón le saca en cara que no le importa Dios, además le dice que, si lo vuelve a ver en su palacio, lo matará.
Viernes:
Los egipcios del palacio al fin podrán comer y calmar su hambre. A pesar de ser amenzado de muerte, Moisés irá nuevamente al palacio para intentar conversar con el faraón. Los guardias le advierten lo que puede llegar a ocurrir. Muchos egipcios abandonarán el palacio. Moisés encara a Ramsés y le dice que la peor plaga llegará a Egipto.