Duro y parejo le dieron a Toto González y a Luchi García por la conducción de Miss Universo Paraguay, la hija de Pelusa Rubín decidió dar la cara e hizo un mea culpa admitiendo que no estaba lista para un evento de semejante magnitud.
“Cometí el error al aceptar conducir un evento tan grande. Me creí la película de que podía atropellar todo, me creí la película de ser la futura revelación, me creí todos los halagos que me tiraron desde que comencé. Atropellé, no medí y me estrellé”, manifestó en su programa de radio entre lágrimas.
La conductora dijo que sobre la marcha se dio cuenta que la magnitud del evento la superaba.
“Evidentemente esa noche hubo momentos incontrolables, nunca me pasó pero me bloqueé. Fue desesperante darme cuenta en vivo de que no estaba preparada, que fui irresponsable, pero quizás eso no fue lo que más me dolió. Me duele más que siempre todo lo que hago busco hacerlo perfecto. Y esto estuvo lejos de eso. Me sobre exijo con todo lo que hago y solo los que me conocen de verdad lo saben. Soy mi peor enemigo porque me pego más de lo normal”, indicó.
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Dio la razón
Luchi admitió que muchos de los que la criticaron tuvieron razón y acepta que se equivocó, pero le duele porque no está acostumbrada a fracasar.
“Esta vuelta lo único que tuve que hacer es leer los comentarios, sentirme mal y darle la razón a cada uno de ellos. Duele, porque me acostumbraron en poco tiempo a ser ‘la chica diez’, ‘la que hace todo bien’”, dijo.
La conductora recibió el apoyo de sus colegas y hasta su madre entró a Instagram para darle fuerzas. “Estoy orgullosa de vos hija, un tropezón no es caerse y hoy tocaste el fondo de la piscina para tomar impulso y salir. Te amo”, le escribió.